Recientes investigaciones han mostrado como el té puede ayudar con enfermedades de la talla de cáncer, los problemas de corazón o incluso la diabetes. Además, algunos tipos de té, sobre todo el té verde, tienen fama de fomentar la pérdida de peso y reducir el colesterol. Por tanto, y aunque los nutricionistas aún no se hayan puesto de acuerdo en que tipo de té es el que reporta más beneficios o cual es la cantidad diaria recomendada de cada uno, lo cierto es que, como se puede ver en esta infografía, existe prácticamente un tipo de té para cada cosa. Eso sí, mucho cuidado con las infusiones elaboradas embotelladas, pues contienen muchos edulcorantes y por tanto calorías adicionales. Lo mejor es preparar los tés hirviendo el agua uno mismo.
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"Porque prevenir es mejor que curar"